Estoy contigo Luis.
Besazo enorme!

Aupa Luis: No sé si recordarás una comunicación que tuvimos hace tiempo sobre las influencias musicales y etc... donde tú me decías que era una pena que apareciesen Delorean en mi lista. Bueno, el caso es que he encontrado mi respuesta a tu respuesta y quería que la leyeses. La pego aquí. Ya me dirás algo.

ON MUSIC: ESPEJOS
¡Ah, las influencias musicales! ¿Quien de ustedes, queridos lectores, no ha querido ser como Dylan, Mick Jagger, John Lennon o Perico el de los palotes? ¿Quien, al coger una guitarra, no se ha dicho: soy el puto Santana, el puto Hendrix, el puto Angus Young, el puto Mark Knopler? Hasta el mismo Fito Cabrales fusila los riffs de guitarra de Knopler en su afamado, vendidísimo e insufrible Por la boca vive el pez (odio los ripios poéticos à la Sabina). Después otros quieren ser como el pequeño genio vizcaíno. Enigmas tiene este mundo.

Pues bien, nuestra patria independencia musical esta llena de esos pretenciosos artistas que no quieren ser ellos mismos, o no saben, o no les salen de las pelotas, porque es mucho más chachi emular al hype de turno que buscar su propia expresión artística y responderse sobre sus propios enigmas (no el de por qué triunfa Fito).

Sinceramente no entiendo por que se aclama a artistas como La Bien Querida, Veracruz, The New Raemon y tantos otros, cuando en realidad son pálidos reflejos de otros artistas que lo hacen infinitamente mejor que ellos. Artistas anglosajones, claro está. Aquí siempre vamos tres o cuatro pasos por detrás y nos negamos a mostrar expresiones más nuestras y verdaderas. ¿Por que no se cita en revistas como Rock de Lux o la porquería de Mondo Sonoro a Nena Daconte, Miranda! o Amaral o lo puñeteros Pereza, cuando a todas luces son mucho mejores bandas de pop que Joe Crepúsculo, Mendetz, Right Ons o Cat People, quienes sí que aparecen en las listas de lo mejor del año?. No se les cita por que se creen la élite, cuando en realidad están tan manchados como el palo del gallinero. Como los otros.

Escuchando a Cat People o The Right Ons no sé a quien estoy escuchando, me confunden; estos últimos por ejemplo a ratos son los Killers (¡aaaargh!) a ratos la E.L.O., a ratos los Strokes. Los otros son peores, por momentos quieren ser Editors, por momentos juegan a ser The Cure y en otros ratos Interpol (quienes a ratos juegan a ser... ) y así hasta la nausea. Escucho a La Bien Querida y me asalta la duda ¿Es Cristina Rosenvinge? ¿Las cantantes españolas no saben cantar mejor, menos plano; no conocen matices? Eva Amaral, la ñoña Diana Navarro o Pasión Vega, cantan muuucho. Me abuuurro.

Me asusta el que primero tengan que venir de fuera y luego hagamos. Viene Elliott Smith y surgen trileros como Siwel, lo mismo con Ron Sexsmith y el palizas de Jonston o vienen Wolf Eyes y comienzan a surgir grupos de ruido extremo. Somos lo peor, y esto mismo vale para Second, Mendetz, Delorean, Sidonie, Sunday Drivers y los artistas o las corrientes que emulan (si ni siquiera tienen nombres en español). Corrientes que, por otra parte, desaparecerán en breve y se los llevarán con ellas.

Cómo dicen por ahí: Confórmate con ser quien eres, los demás ya están cogidos. Pero no, es más fácil vertirse como se viste otro, degustar los gustos de otro, decir lo que dice otro, defender las posturas que defiende otro y, por fin, pensar lo que piensa otro. Es llevar nuestro patrio que inventen ellos al paroxismo. De este modo jamás dejaremos de ser unos mediocres simuladores de algo que sucede en otro sitio, en otro lugar y en otras condiciones diferentes a nuestra idiosincrasia. Tratamos de hacer que algo ajeno explique lo que sucede aquí y en nosotros. Y ese lenguaje (musical) ajeno no sabe explicar lo nuestro por que no lo comprende, pues fue concevido para explicar otros enigmas, o alegrar otras fiestas. Desde esta perspectiva el artista se anula, se convierte en algo extraño que no comunica y no lo hace por que trata de explicarse en...

el componente de amistad Q me une al artista hubiera sido distinto, seguiría ignorante de ese trabajo.

La verdad es Q el panorama musical actual deja de lado el RIESGO, término Q me comentaste una vez y Q ahora utilizo para analizar las nuevas corrientes musicales. Sin riesgo el aburrimiento está casi garantizado y nos deja una década sin revoluciones juveniles de interés, algo sin precedentes en la cultura popular contemporanea.

Saludos.

luis beltza.


MI RESPUESTA A TU RESPUESTA:

Yo también soy indulgente muchas veces. Hay un montón de grupos que me gustan que son reflejos de otros anteriores, y algunos de ellos son vanos. Lo mismo ocurre con otro montón de músicos que conozco y con los que he compartido tragos, conversaciones y amistad, la lista sería muy larga: desde los Allnighters de Igu hasta Rubia (a Sara le hubiera encantado ser Carly Simon, Carol King o Marianne Faithfull ¿ves lo que te digo?) pasando por Yosu de Eskorbuto (loco por los Who), Doctor Explosión, Los Rotos, Los Painkillers, Pko Putreak, Patrullero Mancuso (y el resto de la saga, vía Murky), Pribata Idaho, Lee Robinson y, más recientemente McEnroe (pop melancólico) Olimpic (Rock dance) o Novato & Mad Muasel (Dancehall) Mattin, Josetxo (ex Cancer Moon) y La Grieta, Ura, etc...
El caso es que la mayoría de las veces el componente de amistad ha pesado más que mi criticismo (¿puede decirse así?) y he valorado esas ganas con las que la gran mayoría de ellos se lanzaban a la aventura, por que en el fondo, y de alguna manera esa aventura corría paralela a la mía. No hace falta decir lo que ha significado y significa la música para nosotros, melómanos perdidos.
De todos modos yo no soy el Papa con poder absoluto para excomulgar o decir quienes son auténticos y quienes no. Que cada perro se lama su propio cipote e investigue en su espíritu. Ahora recuerdo aquello que cantaba Ian Curtis: I got the spirit, but loose the feeling. Que cada cual se lo haga mirar.

Decía que la mayoría de las veces el componente de amistad ha pesado más que mi criticismo, aunque no siempre ha sido así. Alejandro me regaló el primer single de Los Flechazos cuando vino a mi casa en Londres y me pareció tan malo que lo tiré por la ventana (creo que el Chino y Álex Subinas, o quizás Igu, fueron testigos), después se lo dije al propio Alejandro que se mosqueó un montón. Le comprendo. Todavía hoy siguo pensando que su música es una mierda pinchada en un palo, y que él no es más que una copia barata de Paul Weller. Es terrible ser así pasados los cuarenta (y bien pasados, joder). Lo mismo va para el resto de mochis viejunos y patéticos que pululan por ahí. Al mismo Igu, al que le tengo muchísimo cariño, le preguntaba si escuchaba nuevas bandas (evidentemente mi intención era saber si escuchaba nuevos sonidos) y él me contestó que sí, que escuchaba a Mando Diao; y no, no se trataba de eso. Para mi Mando Diao son un grupo de revival que repiten fórmulas arcaícas y por lo tanto no válido en el contexto de lo que yo le trataba de preguntar, y así se lo hice saber; pero él no lo veía así, estaba convencido de estar escuchando algo nuevo. En fin, ejemplos como este ad nauseam.

Evidentemente esto no tiene nada que ver con sentirse joven de espíritu y con ganas de conocer nuevas cosas y maravillarse, faltaría más. Debemos mantener la curiosidad hasta el día de nuestra muerte, en que nos sorprenderá la curiosidad mayor. Quizás sea, precisamente, por este espíritu de curiosidad que aun mantengo el que me haga ser más crítico con todos estos que se quedaron en el 84, el 87 ó el 95 (me da igual la fecha).

Delorean se han llevado la torta, más que por ellos mismos, que no son malos, por representar cierto sonido muy copiado por aquí, y desde luego esa apuesta les hace estar a la cola con respecto a otros grupos que ya exploraron estos caminos antes que ellos. Y muchos con mejor fortuna. Quizás tenía que haber puesto a We Are Standard (a quienes también conozco) antes que a ellos.

Si te das cuenta todo este fenómeno (revivals, seguir la corriente, copiar y perpetuarse) sólo se da entre los músicos y artistas blancos, dentro de la música negra no existen tales revivals; se trata de tradición.

Evidentemente a mí me gustan muchísimas bandas y artistas, y hablo ahora como creador. Es decir también tengo mis influencias, sí, pero lo que ocurre que lo son en cuanto a que el espíritu de estos creadores me anima a que busque en mí mismo un lenguaje propio. Entre mis totems musicales tengo que citar toda la saga Throbbing Gristle/ Psychic TV: Coil, Time Machines, Threshold House Boys Choir. También Einsturzende Neubauten,el krautrock, especialmente Neu! y Popol Vuh, Autechre, Esplendor Geométrico, Pan Sonic, Current 93, Nurse With Wound, Nico, el free jazz, Arvo Pärt, Gyorgy Ligeti, el post-punk y otros cientos de creadores. En cualquier caso no sueno como ninguno de ellos. Pueden sonar ecos, puedo tran

Pueden sonar ecos, puedo transitar caminos que ellos recorrieron, pero con mi propia brújula. Y esto, además, teniendo en cuenta que yo trabajo con samplers. Samplers que manipulo a mi antojo buscando la combinación adecuada. En realidad trabajo como un productor de hip hop, pero no sueno a hip hop; sueno a Derriere,y ello me hace sentirme orgulloso. Lo cierto es que me he quedado muy satisfecho de la agogida que ha tenido mi propuesta en myspace.
Me enorgullece que te haya gustado. Sobre todo por que sé que tú te molestas en descubrirte sonidos nuevos, y eso dice mucho de ti. De entre todos mis amigos al único que le gusta es a Javi Cámara; Álex lo respeta, pero no le gusta. De todos modos lo que más me molesta son reacciones como la de Esther (ex de José Ángel) tipo: Qué rayada. Vale, ok, es su opinión, pero no la respeto por que está hecha desde la pereza, y de los perezosos no se puede esperar más que eso: pereza.

Si señor el RIESGO lo es todo, es un camino mucho más difícil y complicado, pero la recompensa es mucho mayor. Lo demás es mero entretenimiento y bagatela.

Un abrazo, Luis.

P.D.:Te pego aquí un manifiesto que escribí hace un tiempo y que ilustra mis ansias artísticas y creativas:


MANIFIESTO EN EL UMBRAL DE LA PUERTA:

Espejo negro

Hoy el arte ha perdido su carácter mágico, la experiencia que posee el poder de la revelación, la fuerza intangible que tiene el poder de la anticipación. Ha perdido la energía que contribuye a crear condiciones de cambio, la sospecha de lo posible en la vida, transformándose en una suerte de entretenimiento de élite sin profundidad ni significado. Hoy el arte no tiene sentido más allá de mostrar el ego del artista. Hoy padecemos un arte alejado de la sociedad, comprometido únicamente con quien le guarde la espalda al artista mientras el tiempo que dure el contrato entre ambas partes. Hoy padecemos un arte refugiado en su propia máscara. Un arte que no procura respuestas transcendentes ni inventa nuevos lenguajes.
No se le pide aquí las respuestas de la filosofía, el psicoanálisis o la sociología, sino sus propias soluciones en tanto que fuerza creadora activa. Y ahí es donde debemos exigirle esas respuestas. En la negación de esa misma argumentación, el arte moderno podría ser considerado una suerte de arte científico, puesto que al igual que la ciencia no ofrece, no procura, esas respuestas transcendentes, no contesta a los por qué (y aquí debemos recordar que los niños -y los niños poseen una verdadera visión entregada al mundo- jamás preguntan cómo sino por qué) la ciencia se conforma con ofrecer simplemente el cómo. Ofrecer el cómo no es ir demasiado allá; es pedirnos subordinación a los mecanismos de funcionamiento. Esto no calma la sed.

La experiencia artística (y hago aquí un llamamiento a todas y cada una de sus disciplinas)ha de ser un viaje al punto extremo de las posibilidades del artista. Del hombre que se llama así mismo artista, en tanto que transmisor de símbolos, viajero iniciático o creador de relámpagos, debe intentar alcanzar ese punto extremo de lo posible, donde no se puede concebir una posibilidad de ir más allá. Todo lo demás le hará siervo de la instrumentalidad, de la funcionalidad; será una brutal mentira. Un bálsamo para espíritus débiles, cuentos que nos gusta propurarnos para tratar de aliviarnos.
Hay que desprenderse de espejismos y terrores. Hay que abandonar el sueño o la ilusión en que transcurre la existencia humana, cuyo origen se halla en una división primordial en la esfera del Absoluto. Por así decirlo, en palabras de Gurdjieff: si quiere usted adquirir algo por sí mismo, debe usted aprender a volar.



Combustión espontánea

Frente al arte que ha perdido su carácter mágico, un arte que muestre la Voluntad Verdadera del artista. Del hombre que ha tomado ese camino. Frente al arte del ego, un arte que se remita a las estrellas. Frente al arte que sonríe bobaliconamente ante sus propias ocurrencias, un arte consagrado, intensamente presente. Frente al arte charlatán y vocinglero, un arte que comunique su maravilloso silencio. Frente al arte que ya no cura, un arte que busque la curación en sí mismo. Frente al arte que yerra, un arte que se trague la serpiente. Frente al arte alejado del hombre, un arte que recupere el factor de recuerdo y sea capaz de transmitir sus símbolos. Frente al arte al que le espanta ver su propio vacío, un arte que entre en sí mismo. Frente al arte que rechaza sus propias reglas y su aprendizaje, un arte que comprenda que el tiempo no cuenta. Frente al arte de la nada, el arte del Absoluto. Frente al arte que se empeña en ver el punto rojo en el paño, un arte que quiera ser espejo del todo. Frente al arte que no penetra en la naturaleza, un arte que se transforma en el objeto o ser amado ¡tiene que ser verdaderamente él!. frente al arte que rechaza el dolor, un arte que muera para no morir. Frente al arte que no es ca

Frente al arte que no es capaz de mostrar un lenguaje nuevo, el arte de la invocación y la ceremonia. Frente al arte que tropieza todas las noches con los huesos de los muertos, un arte que no precise guías. Frente al arte del cómo, un arte que busque desesperadamente el porqué.


¡Dolor, oh dolor!

Este mundo se le da al hombre como un enigma a resolver. Desde el principo de los tiempos ese hombre ha tratado de resolver el enigma a riesgo de ser devorado por la esfinge, y aun por este mismo temor. Ha construido su voluntad en base a su imaginación para explicar el mundo que le rodea y el que imagina que le rodea. Tratando de aventurar en qué manera estamos incluidos en el misterioso mecanismo del mundo y cual es su condición. Desde las mágicas pinturas primitivas que hacían ver el objeto simbólicamente representado a la sofisticación de la escritura jeroglífica, la síntesis de la cuneíforme o la delicadeza de los ideogramas orientales, hasta la complejidad de cosmogonías y mitologías, anticipadoras de la filosofía. Una desaforada búsqueda del logos.
A pesar de ello la incomprensión y la inhapresibilidad de tamaña empresa -los desmayos de la voluntad- han sumido al hombre en la melancolía y en el dolor. Llamaremos a este dolor evidencia absurda pues si bien la causa de ese sufrimiento está localizado, no menos cierto es que se trata de una abstacción sin cuerpo ni formas. Un ideal o un fantasma de nuestra concepción bien amarrado en el arsenal psíquico humano. En fin, un dolor (dolor del alma, la psique enferma) que ni las religiones ni todos los sistemas filosóficos han conseguido mitigar. Si bien el arte y sus videntes, en el ejercicio de su máxima libertad, han sido quienes más cercanos han estado de encontrar una respuesta al enigma, al dolor. Pues en virtud de esa misma libertad, más allá de la razón y la pesadilla que engendran un mundo cada vez más ambiguo, más solapado, han solido poner el dedo en la llaga. En el ejercicio de su libre albedrío han imaginado esas respuestas a los problemas que enfermaban los espíritus en cada momento, y más aun: incluso han imaginado los mundos que nos esperan en un futuro con una exactitud que asusta en ciertos casos.
Aun así la insatisfacción, la puerilidad, las aspiraciones y los deseos blandos de nuestros días nos han convertido en víctimas de los sueños de un deseo mayor. El deseo de un monstruoso ídolo que se conforma con ver a sus criaturas a la deriva. Aquí es cuando debemos decir ¡NO! un no que derribe montañas con su estruendo, un ruido de personas decididas a dejar de ser zombis babeantes y cariacontecidos que si caminan es porqué ya es un hábito adquirido. Hay que decir no al dolor y al cruel juego del victimismo en el que nos sentimos como cerdo en un baño de barro. No somos golems esperando ser creados por la palabra del mago negro de turno. Debemos hacer nuestra la palabra, habitarla, arrojarla a la cara del autonombrado demiurgo y destruirlo. Debemos ser poetas, el artista debe intentar por todos los medios a su alcance (y si no los tuviese inventarlos) hacerse poeta; cambiar la vida, transformar el mundo (sí, como decían los viejos surrealistas pero bajo el signo de nuestros tiempos, con nuestras necesidades). Aunque en el intento solo logre cambiar su propia vida ya será una enorme recompensa. La Poesía es la única herramienta que tiene el artista para destruir a la efigie, para combatir al dolor. Debemos transformar cada pintura en un poema, cada escultura, cada canción, cada novela, cada película, cada tratado filosófico en un bello poema y una búsqueda del Invisible que nos sane de nuestra condición anhelante. En definitiva: el artista debe marcar con su poesía el camino a seguir. Que rían los espíritus pobres si quieren. Del perezoso solo se puede esperar pereza y esto es absolutamente imperdonable en un hombre que se llama a sí mismo artista, creador, buscador del Invisible.

Querido Carlos.
Voy a tener Q cambiar la programación de los comentarios, quitarles los límites, ampliar hasta el infinito los caracteres posibles. Lo Q necesitas y nos haces necesitar, es un scroll Q nos lleve hasta Andrómeda, una página en blanco donde puedas escribir sin descanso y nosotros llorar y reír sin poder dormir. Amigo Carlos, formas parte de la Beltza Scene desde hace mucho, mucho tiempo, te acuerdas cuando me acompañabas de una distri a otra??? Estaría encantado Q volvieras hacerlo en este proyecto digital con todo el RIESGO físico de 20 años a pie de calle. Beltza Records es una tienda de discos como muchas otras, pero no se parece a ninguna otra!!!
Es una experiencia vital y personal en la Q puedes colaborar, me conoces mucho más Q a Tom (my space) o al idiota del Facebook, yo te aprecio y valoro tú trabajo, ellos no saben ni quien eres. En Beltzarecords/beltzascene.com cuidaremos tus talentos y trabajaras codo a codo con Luis Beltza. Piénsalo, ya me dirás la decisión.

Muchas gracias por todas y cada una de las reflexiones Q depositas en este humilde y perdido planeta en la gran RED virtual.

Saludos ;-)))